Moneda souvenir del Castillo de Peñíscola

La Moneda Conmemorativa del Castillo de Peñíscola está fabricada con una aleación de distintos metales cobre, zinc, estaño y otros. Mediante procesos químicos y de oxidación conseguimos acabados de gran calidad en dorado, plateado o envejecido según el caso.

Variantes: Disponible en color Dorado

Tamaño: 30 mm diámetro.

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Color

Dorado

Descripción

La Moneda souvenir del Castillo de Peñíscola está fabricada con una aleación de distintos metales cobre, zinc, estaño y otros. Mediante procesos químicos y de oxidación conseguimos acabados de gran calidad en dorado, plateado o envejecido según el caso.

Características :

Variantes: Disponible en color Dorado.
Tamaño: 30 mm diámetro.

Mas detalles:

Todas las monedas de nuestra colección incluyen funda protectora plástica. Las fundas protectoras protegen el metal de posible oxidación y aseguran la buena conservación de nuestras monedas.

Funda protectora monedas

El grabado se consigue mediante la técnica de acuñación, utilizamos para ellos matrices o troqueles creados artesanalmente por nuestros grabadores y torneros.

Historia:

El Castillo Templario-Pontificio de Peñíscola, también conocido como el Castillo del Papa Luna, comenzó a construirse 1294 y se terminó en 1307. Levantado por los caballeros Templarios, lo edificaron a imagen y semejanza de los que antes habían construido en Tierra Santa.

En sus muros se esconden los secretos de la vida del “Papa Luna”, Benedicto XIII. Vivió en esta fortaleza sus últimos años, entre 1411 y 1423, transformando el castillo en palacio pontificio y defendiendo su legitimidad como Papa hasta su muerte. 

En la zona inferior se localizan las murallas construidas en tiempos de Felipe II. Las modernizó para mejorar las defensas del castillo medieval y combatir los ataques de los piratas y de la armada turca.

La parte superior del fortín y jardines conecta con el castillo medieval, y con el área del faro.

El edificio del faro es de finales del siglo XIX y desde 2017 es Centro de Recepción de Visitantes.

Si disfrutas de un paseo tranquilo desde la plaza del faro, puedes contemplar la torre del Papa Luna del siglo XIII y, junto a ella, el bastión que protege la entrada construida en tiempos de Carlos I. También, las escaleras del Papa Luna, a 45 metros sobre el nivel del mar.